
Guillermo Francos fue el arquitecto que firmó los planos para la votación en Diputados que permitió aprobar ley ómnibus XS y una de sus últimas negociaciones podría ser la decisiva para que el oficialismo reúna una mayoría en el Senado, que por ahora no aparece. Es la que el ministro del Interior mantuvo con el gobernador de Santa Cruz, Claudio Vidal, para definir el futuro de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT).
La rosca de Guillermo Francos
Vidal mantuvo las reuniones decisivas con Francos la semana pasada, mientras se definía el dictamen de comisión en Diputados. En las últimas gestiones, el gobernador sumó a Oscar Sánchez, secretario adjunto del personal técnico y superior de YCRT (APSPYT), beneficiado con el sistema de PPP que sustituyó a la privatización lisa y llana.
Sánchez fue el encargado de llamar el domingo, horas antes de la sesión, a los diputados José Garrido y Sergio Avecedo, del bloque identificado con Vidal, para informarles que la venta parcial de YCRT había dejado de ser una opción.
Acevedo fue el más sorprendido: se enojó cuando, en la reunión de labor parlamentaria, el resto de las fuerzas políticas decidió que el artículo de YCRT no se iba a poder votar por separado, sino como parte del capítulo de las privatizaciones.
Ese mismo lunes la rosca siguió. Mena, el intendente de Río Turbio, reunió en el bar Casablanca a los diputados Garrido, Acevedo y al de UP, Gustavo González. Les explicó que el texto estaba acordado con el Gobierno y que lo mejor era votarlo.
Acevedo tuvo una precaución: pidió cambiar el nombre del organismo sujeto de privatización, que pasó de ser YCRT a “Complejo, Carbonífero, Ferroviario, Portuario y Energético”. El exgobernador temía que usaran la facultad de disolver organismos que autoriza la ley ómnibus para dividir la empresa en mil pedazos.
La votación
Acevedo fue el único diputado santacruceño que blanqueó la negociación sobre YCRT durante la votación del capítulo de privatizaciones. “Hubo un especial pedido en aras de preservar sus fuentes de trabajo y la paz social de las organizaciones sociales de Río Turbio, 28 de noviembre y de Julia Dufour. Se han comunicado con los diputados de Santa Cruz para pedirnos que tengamos un voto afirmativo”, contó el exgobernador. Su relató obligó a los gremialistas a hacerse cargo de gestiones que hasta ese momento se mantenían en las sombras.
“No teníamos otra posibilidad. Hubiéramos quedado a la buena de Dios. Sabemos que no es lo mejor, pero somos conscientes de que este Gobierno quería cerrar el yacimiento”, sostuvo Sánchez.
El dirigente destacó que YCRT quedó en mejor posición que el Correo Argentino, que será entregado en concesión. Hay otra lista reducida para privatizar, integrada por Aerolíneas Argentinas. La otra compañía que se reservó la mayoría accionaria para el Estado fue Nucleoeléctrica.
Hubo referentes santacruceños de ATE y del Sindicato de Luz y Fuerzas que manifestaron su disconformidad con la privatización parcial, pero tampoco salieron a combatirla.
La dupla decisiva
La mira de Francos no estaba puesta en los dos diputados que llegaron de la mano del gobernador; sino en los representantes santacruceños del Senado, José María Carambia y Natalia Gadano.
Ambos se aliaron a Vidal para la última elección. Carambia con su partido local, Movere; y Gadano con un sector del PRO. No consideran al mandatario un jefe político, sino un socio.
En las cuentas de Victoria Villarruel, Carambia y Gadano son decisivos: integran el grupo de 39 que la vicepresidenta busca para abrir el recinto sin tener que ir a tocar la puerta de Unión por la Patria.
Luego del cierre de la construcción de represas de Santa Cruz, la dupla austral rompió con el Gobierno y ni siquiera votó la autorización a Javier Milei para salir del país. El dúo también rechazó el DNU 70/23.
Para la ley ómnibus XS no emitieron opinión y tal vez recién lo hagan en la votación. Fuentes cercanas a la bancada aseguraron a Letra P que supieron del acuerdo por YCRT el mismo día que se aprobó en Diputados y no les cayó muy bien.
Ambos senadores tendrían dudas sobre la viabilidad de la PPP y quieren saber si no hay chances de que, aún con mayoría accionaria, el Gobierno no tenga previsto echar al personal, una facultad que le asigna la ley ómnibus.
Francos sabe que son dos votos decisivos, aunque tiene otro problema: no podrá contar con ellos para aprobar la reforma de Ganancias, eje del paquete fiscal. Ese proyecto, por ahora, no tiene los votos para ser sancionado.
Fuente Letra P