El 2 de agosto de 1915, hace 110 años, la estación Retiro (actual línea Mitre) se inauguraba luego de siete años de planificación y construcción. En su época, y durante muchos años, fue una de las estructuras de hierro más grandes del mundo.
Actualmente, la estación forma parte de la línea Mitre, que transporta más de dos millones de pasajeros por mes y se suma a la red ferroviaria compuesta de otras siete líneas de ferrocarril. Por su importancia arquitectónica e histórica, Retiro fue declarada Monumento Histórico Nacional en 2006.
¿Cuál es la historia de la estación Retiro?
A fines del siglo XIX, la expansión de la actividad portuaria en Buenos Aires requería de una infraestructura del transporte que conectara los distintos puntos del país. Para ello estaba el Ferrocarril Buenos Aires, que unía la ciudad con el Puerto de Ensenada.
Su estación central, detrás de la Casa de Gobierno, tenía de un gran edificio de madera con un reloj en el centro. Sin embargo, hacia 1897 sufrió un incendio que la redujo a cenizas. Sumado a la construcción de Puerto Madero, se decidió que la nueva estación terminal debía estar próxima a él, para facilitar el ingreso y egreso de materia prima y bienes.
Así fue como, luego de un concurso, el proyecto quedó a cargo del ingeniero Reginald Reynolds y de un grupo de arquitectos ingleses entre los que estaban los hermanos Eustace Lauriston Conder y Roger Conder. Por su experiencia en la construcción de estaciones, principalmente en Inglaterra, la estación Retiro recibió la influencia de esas grandes terminales de pasajeros.
Prácticamente la totalidad de las piezas que se utilizaron en la construcción de la terminal fueron traídas desde el Reino Unido. Su estructura se asemeja a aquella de las estaciones europeas, está hecha en hierro y vidrio. Por otro lado, el estilo academicista francés se deja ver en:
- Los altos ventanales.
- La confitería.
- El Gran Hall de entrada.
- El frente.
En sí, la estación Retiro está compuesta de tres naves. La principal es la que cuenta con la cúpula, y aunque en la actualidad la inscripción en la fachada refiere a la línea Mitre, en su momento se leía «Ferrocarril Central Argentino«, pues era la única línea que utilizaba la estación. Las dos naves de los costados alcanzaron una longitud de 250 metros, distancia que mantienen en la actualidad.
El proyecto original se dividía entre un edificio administrativo, la estación con los andenes y la boletería, y otro edificio destinado a cargas y equipaje. Se construyeron los dos primeros y, con el tiempo, llegó el tercero. La fachada, por su parte, tiene el estilo clásico de las estaciones ferroviarias inglesas, que fueron inauguradas más de ochenta años antes, para 1830.
Así fue como, una de las estaciones más transitadas hoy en día, se inauguró el 2 de agosto de 1915. Con el tiempo, aparecieron la vecinas, que hoy son terminales de la línea Belgrano y San Martín.
Fuente Billiken
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