El examen médico sobre el cuerpo de Kiara Jazmín Caro, la niña de 7 años hallada muerta a la orilla del río Lules en Tucumán, reveló cuáles fueron las causas de su muerte y las circunstancias que la llevaron a este fatal desenlace. Por el hecho, la madre de la menor recibió prisión preventiva, al considerar que existe peligro de fuga y entorpecimiento de la causa.
El informe forense confirmó que la niña falleció por “asfixia por inmersión”, es decir, que se ahogó, pero también presentó múltiples golpes en la cabeza y el rostro, lo que sugiere que sufrió una agonía prolongada antes de morir.
El documento, dado a conocer durante la audiencia en la que se formalizó la detención de Daniela Fernanda Ávila, destacó además que el deceso se debió a las circunstancias del entorno hostil y sin posibilidad de pedir ayuda, dado que habría sido abandonada en el río.
Esta es una de las hipótesis sobre la cual las autoridades trabajan y que tiene bajo sospecha a la madre de la menor, quien la habría dejado en ese lugar sin brindarle asistencia.
Al mismo tiempo, los forenses determinaron que la menor había tragado barro producto de su lucha al quedar atrapada en el agua, el pasado domingo por la madrugada cuando ocurrió el episodio.
“Las características del hecho lo hacen especialmente gravoso. Estamos hablando que la víctima es una niña de siete años, que fue dejada sola en medio del cauce del río a plena noche, sufriendo golpes y agonizando, mientras la imputada optaba por volver a los corsos, dando posteriormente datos falsos que entorpecieron la investigación”, señaló el fiscal durante la audiencia.
Ávila, de 24 años, se encuentra acusada por el delito calificado como abandono de persona seguido de muerte, agravado por el vínculo en calidad de autora, una formulación que tuvo lugar en las últimas horas tras realizarse una audiencia de la que participó la Unidad Fiscal Especializada en Homicidios I, a cargo de Pedro Gallo. Fuentes del caso detallaron a Infobae que la mujer fue trasladada a un psiquiátrico para que definan un tratamiento para ella debido a que la mujer manifestó un cuadro de ansiedad severa.
El caso
Según Gallo, la madre intentó desviar la investigación con información falsa, presentándose en la Comisaría de Lules para denuncia la desaparición de Kiara cerca de las 5.30 de ese día. En su declaración, sostuvo que perdió de vista a la niña mientras caminaban juntas por la orilla del puente donde la ruta 301 cruza el río.
Sin embargo, la investigación reveló que intentó acortar el trayecto que tenía hasta la casa de su pareja, cruzando el río Lules a pie, exponiendo a su hija a un grave peligro. La menor habría quedado en medio del cauce sin recibir asistencia.
En las primeras horas de la mañana, el fiscal se presentó en la zona del hallazgo junto con Ramón Soria, investigador de la fiscalía, para coordinar las primeras diligencias en el marco de la causa. Tras recabar los testimonios iniciales de familiares y allegados a la víctima, el fiscal ordenó la detención de la madre de Kiara, y de su pareja. Según trascendió, al momento de ser arrestada, la mujer manifestó no recordar lo sucedido y se limitó a decir: “No me acuerdo de nada”.
Un amplio operativo se desplegó en la zona con la participación del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales, personal de la comisaría local, Defensa Civil, unidades de la Policía Motorizada y el Sistema de Emergencias provincial. Durante varias horas, los agentes realizaron peritajes en el área con el objetivo de reconstruir las últimas horas de Kiara antes de su muerte.
Dos horas después de iniciados los procedimientos, las autoridades localizaron el cuerpo en el cauce del río, en el mismo sector donde su madre había afirmado haberla visto por última vez. La menor vestía una musculosa rosa, un short de jean celeste y zapatillas deportivas en tonos rosa y gris.
Fuente Infobae
