
Ramiro esperaba en Aeroparque y las nubes bajas no permitían el despegue. Su amigo lo había convencido de hacer una travesura, escaparse después del colegio a conocer su pueblo, Río Gallegos. El vuelo demorado le permitió mandarle un mensaje a la mamá contándole la macana que estaba por hacer, y se salvó la vida: su amigo era un contador de cincuenta años que lo había contactado por un juego infantil y lo estaba por subir a un avión para hacerlo desaparecer.
Son empresarios, que trabajan con políticos, que coordinan la policía, para que los chicos, menores y chicas menores y mayores, caigan en una red de trata para que sus familias no los vean nunca más. Pasó, pasa y va a seguir pasando, todo delante de jueces, fiscales y políticos que dan discursos sobre el flagelo de la trata. En Misiones faltan chicos, en Pergamino también, en Ushuaia los chicos no desaparecen, llegan chicos nuevos y chicas del norte. Vienen desdémona Caáguazú, Paraguay, desde Misiones, la Triple Frontera.
En Pergamino el ex intendente Héctor Cachi Gutiérrez decidió dar por terminado su protagonismo en la política local. La hermana Marta Pelloni se encontró con que los testimonios de menores paraguayas que integraban los prostíbulos de la zona, en especial Spartacus, coincidían en que el mayor consumidor y controlador de la prostitución en la zona era el intendente. Obviamente Gutierrez dijo que todo era una operación, pero hizo a un costado sus aspiraciones y se llamó a silencio. No es Pergamino, es un sistema, una lógica, que impera en la mayoría de los municipios del país.
Jorge Cabak era intendente de Macachaín, La Pampa. También firmaba las libretas sanitarias de “La Chicho Show», donde la trata reclutaba y sometía chicas de la zona para que sean usadas todas las noches. Estaban a 115 kilómetros de Santa Rosa, la capital de la provincia donde el Peronismo gobierna sin pausa. Toda la política pampeana está al tanto de la red de trata provincial y los prostíbulos siguen abiertos.
Newstad habló con Viviana Caminos, de RATT, la asociación que da una batalla muy desigual para conseguir recuperar las chicas víctimas de trata. Red Nacional de Alto al Tráfico y la Trata es RATT y trabaja de sol a sol para rescatar víctimas. Todas, absolutamente todas coinciden: la política coordina la policía para que vayan, consuman, retiren parte de la caja y se vayan.
Viviana cuenta cómo el viaje y la captación empieza con una promesa laboral, para poder dejar de padecer el hambre y termina en la nueva forma de esclavizar. Son desamparadas que buscan corregir su vida, creen o prefieren creer en lo que les ofrecen. Después de un viaje largo están sin contacto con su familia, obligadas a consumir drogas y tomar alcohol todo el día y terminan muertas o en estado de absoluto deterioro en prostíbulos donde no les permiten ni bañarse.

Alika Kinan era menor de edad, vivía con su hermana en Córdoba cuando la reclutaron. En un abrir y cerrar de ojos llego a “El Sheik”, en Ushuaia. El dueño, Pedro Montoya y su mujer fueron condenados. La política no sólo lo sabe, es socia en la mayoría de los casos. “Hay una naturalizáción en la explotación sexual y de niños, siempre fue así. Hay provincias feudales donde todo este sistema está vigente”, plantea Caminos.
“No hubo un sólo allanamiento que no haya estado involucrada la policía y la política, siempre fue así, y son consumidores, usan el sexo como forma de pago”, plantea Caminos, quien describió en una entrevista con Federico Teijeiro en la redacción de Newstad con precisión quirúrgica el proceso desde que se contacta a la menor hasta que se la secuestra y esclaviza.
En la mirada de Caminos hay formas claras de captación, los videojuegos hoy son una forma. La seducción con promesa de una pareja formal es la clásica, la oportunidad de trabajo, la histórica manera de comprar la víctima. Así empieza el desastre y termina con personas rotas, aisladas. Otra fue la selección de chicos en los clubes de fútbol, donde Martín Bustos fue condenado a doce años de prisión por promover la prostitución infantil en Independiente de Avellaneda.

Allí se imputó primero a Martín Bustos (árbitro de fútbol hoy condenado y preso); Leandro Cohen Arazi (relacionista público), Alberto Ponte (representante de jugadores y condenado semanas atrás a diez años de prisión), Alejandro Dal Cin (dueño de emprendimientos futbolísticos), Juan Díaz Vallone (empresario) y Silvio Fleytas (empleado de comercio). Todos eslabones de una cadena, siempre a ojos de la justicia, donde se lograba convencer a chicos menores de edad para que tengan sexo con adultos en departamentos en Palermo, La Plata y otras zonas.
Es un tema que involucra distintas personas, algunos fallecidos recientemente que eran protagonistas del mundo del espectáculo.
Los hermanos German y Sebastián Kiczka es el leading case que la política no quiere ni pensar. Amigos y socios de Pedro Puerta, portador del apellido más fuerte de la provincia. Hijo del ex presidente y embajador Ramón Puerta. Un streaming fue su error: jugó con la importancia de un estimulante natural para el sexo y recomendó usarlo para chicas, chicos y “gurises» como se llama a los menores en Misiones. Se lo dijo riéndose a Kiczka y ahora la fiscalía evalúa esperar a que termine su casamiento para llamarlo a indagatoria tras presentar un escrito que no fue escrito por él y que generó más sospechas que certezas.
Los hermanos Kiczka movieron cientos de imágenes explicitas de violaciones de menores. Están ahora condenados pero nunca jamás se movieron solos. Siempre con financiamiento y logística de la política local.
La llamada “Causa Roemmers” está en la mira de la justicia, en manos de Ariel Lijo. El fiscal Ramiro González, máxima expresión de la impunidad en la Argentina al llevar a cabo una fiesta de cumpleaños imposible de pagar con un sueldo de fiscal, pidió cerrar la causa. Alejandro Roemmers está mencionado por Roberto Mazzoni, quien asegura que los testimonios de identidad reservada describen con precisión quirúrgica las noches de sometimiento y viajes a Calamuchita, Córdoba, fiestas en departamentos del centro con un importante empresario del sector siderúrgico y de otros sectores.
También está involucrado Matías Barreiro, integrante del club River Plate que preside Jorge Brito. Es dirigente del club y está apuntado directamente como partícipe necesario de la red de empresarios que nuclean y articulan el desastre con el gimnasio de la calle Córodoba y Bustamante como centro de entrenamiento y reclutamiento de los hombres. Un entramado que llega al poder más alto de la Argentina y que la justicia y la política conocen, consumen y no piensan investigar.

Ariel Lijo tomó vacaciones después del final frustrado para ser parte de la Corte Suprema. Este cronista consultó su despacho. Alejandro Roemmers fue invitado a Newstad a llevar a cabo una entrevista para dar su punto de vista sobre este tema. Matías Barreiro también. Ninguno respondió.
Fuente Newstad