
A cinco años del crimen de Fernando Báez Sosa, el joven de 18 años que fue golpeado hasta la muerte por un grupo de rugbiers a la salida de un boliche en Villa Gesell, Máximo Thomsen, uno de los condenados, que pasa sus días encerrado en la Alcaldía N° 3 de Melchor Romero, expresó que “es difícil estar bien” y reflexionó: “Lo que intentaron hacer con nosotros, como una condena ejemplar para que deje de haber violencia en los jóvenes y en la sociedad, no sirvió en lo más mínimo, porque sigue sucediendo”. Otro de los casos policiales más impactantes de la jornada.
Desde la cárcel donde está detenido, junto al resto de los condenados, envió un mensaje en el que contó cómo está y la reflexión que hace sobre el crimen de Fernando, en el que Máximo fue señalado como el líder del grupo y quien le da la patada fatal en la cabeza.

“Sinceramente en estos días es difícil estar bien, siendo que van a ser cinco años de aquella noche trágica para todos, más que nada levantándose todos los días viendo cómo en los diarios siguen saliendo noticias de peleas afuera de los boliches sin importar todo lo que ha pasado”, expresó en una primera parte del mensaje en el que contó cómo se encuentra anímicamente.
El 6 de febrero de 2023, el Tribunal Oral en lo Criminal N° 1 de Dolores les otorgó las condenas que fueron ratificadas por la Cámara de Casación bonaerense.
“Es como que uno reflexiona y piensa que, al fin y al cabo, creo que lo que intentaron hacer con nosotros, como una condena ejemplar para que deje de haber violencia en los jóvenes y en la sociedad, no sirvió en lo más mínimo, porque sigue sucediendo y con más frecuencia y es algo que a uno lo lastima más, porque no se encuentra con ninguna solución a este problema social”, agregó en el mensaje, según consignó Clarín.
No obstante, en otro fragmento detalló como pasa sus días en el penal, encerrado: “En cuanto a cómo vivo acá dentro, es como siempre, convivimos en un mismo pabellón con el resto de los detenidos compartiendo el patio y las visitas, con seguimiento psicológico una vez por semana”.
Y concluyó: “Tengo el acompañamiento de mi familia y mis amigos, en pareja no estoy pero sigo en contacto por el afecto que nos tenemos”.
Thomsen fue condenado a prisión perpetua, al igual que Matías Benicelli (25), Enzo Comelli (24), Luciano Pertossi (23) y Ciro Pertossi (24). Mientras que Blas Cinalli (23), Ayrton Viollaz (25) y Lucas Pertossi (25), fueron condenados a 15 años como “partícipes secundarios”.
Los rugbiers asesinos cómo pasan sus días en la cárcel
Viven de a dos detenidos por celda en el pabellón tres. Los jueves reciben la visita de sus familiares, que pueden verlos solo ese día de la semana, de 13 a 17.
Al igual que el resto de los internos, comparten actividades recreativas, entre ellas con un profesor de educación física, como lo hace el resto de los otros pabellones.
Además, participan en talleres no formales, como lectura y alfabetización jurídica.
Aunque en un principio todos los rugbiers eran representados por Hugo Tomei, en el juicio Thomsen cambió de abogado, y actualmente es Francisco Oneto. Lo mismo hizo, Matías Benicelli, a quien defiende Carlos Attias.
Los otros condenados siguen siendo representados por Hugo Tomei, que los representó desde el inicio de la causa, aunque fue cuestionado por su defensa.
Fuente Cronica