
Proyecto geotérmico de Copahue: un repaso histórico de su evolución
El proyecto geotérmico del Volcán de Copahue, ubicado en la provincia de Neuquén, es uno de los más polémicos. A pesar de que este proyecto de energía geotérmica estuvo cerca de licitarse en diversas oportunidades, ahora se encuentra en «stand by», debido a las faltas de soluciones adecuadas.
Según la información brindada por la Agencia para la Promoción y Desarrollo de Inversiones de Neuquén, en 1973, la provincia empezó los primeros estudios de exploración en la zona volcánica de Copahue, estos se centraron en estudios de geología regional, geoquímica y pozos de gradiente y gravimetría. Dos años después, iniciaron la primera perforación del pozo exploratorio, el COP I.
En 1981 el COP I empezó a producir vapor seco saturado con caudales del orden 10/15 TN hora a los 1414 metros. Por lo que en 1985 se decidió realizar la segunda perforación de pozo profundo en el lugar, integrándose el COP II con total éxito en el proyecto.
Finalmente mediante un acuerdo financiero con la Secretaría de Energía de la Nación, se puso en marcha la construcción de una Central Piloto, situándose la misma como la primera en Sudamérica, estuvo operando hasta 1997.
Volcán de Copahue: ventajas del proyecto geotérmico
Entre las principales ventajas del proyecto se destacan la calidad del recurso. El yacimiento de vapor dominante en la zona aventaja el omitir el costo de proceso de separación, gracias a la presencia de agua.
Adicionalmente, los bajos costos de perforación de los pozos representó una ventaja sobresaliente, puesto que el yacimiento de Copahue se encuentra a baja profundidad y dispone de una logística e infraestructura aledaña. La provincia de Neuquén cuenta con una amplia plataforma logística, por lo que las empresas del rubro pueden obtener el personal y los servicios necesarios del lugar, lo que la sitúa como el epicentro ideal para el desarrollo de esta energía.
En cuanto a los beneficios directos de este tipo de proyectos, se encuentra el incremento a la oferta eléctrica nacional, la disminución de fuentes de orígenes fósiles y no renovables. Sin omitir la formación de recursos humanos especializados para la labor, permitiendo a nuestro país avanzar en el aprovechamiento de los recursos naturales para la generación de energías más limpias.
Suspensión del proyecto de Copahue: factores que obstaculizan el desarrollo geotérmico
Si bien en el 2018 la provincia mantuvo conversaciones con el fin de licitar una primera etapa de 10 MW, y se llegó incluso a discutir si la convocatoria se realizaría en el marco de la Ronda 3 perteneciente al Programa Renovar, sin embargo, todo esto quedó en la espera otravez.
A pesar los exhaustivos intentos de la Provincia de Neuquén y la Agencia de Inversiones (ADI) por licitar el proyecto, la ciudadanía se rehúsa a respaldar la reapertura de la central energética con argumentos bastante válidos a su favor. Cerca del yacimiento geotérmico se encuentra una laguna, denominada «Las Mellizas», que actúa como la fuente de agua potable más importante de la localidad de Caviahue. El temor de la ciudadanía es que el proyecto geotérmico pueda presentar algún tipo de fuga que, en consecuencia, derive en la contaminación del agua potable de la zona.
En consonancia con este contexto, Giorgio Stangalino, se había pronunciado en su momento en una entrevista con Energía Estratégica. El presidente de la Cámara Geotérmica de Argentina, explicó que el temor ciudadano tiene cierta lógica ya que «una posible fuga de estos pozos podría dejar sin agua a toda la población». El especialista también explicó que, de desarrollarse una fórmula que anule el riesgo de contaminación de las lagunas, el proyecto podría dar el paso evolutivo que tanto se desea.
Fuente Diario 24