La Asamblea General aprobó una resolución en Nueva York que impone “un alto el fuego inmediato, incondicional y permanente en Gaza, así como la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes”. Asimismo, también contempló otra que solicitaba apoyo para la UNRWA y condena la legislación israelí contra la agencia de la ONU para los refugiados palestinos.
La reunión necesita una mayoría de dos tercios para llevar adelante estas resoluciones no vinculantes. Finalmente, la resolución consiguió el patrocinio de más de una decena de países.
Además de lo estipulado, el texto también exige “el acceso inmediato de la población civil de la Franja de Gaza a los servicios básicos y la asistencia humanitaria indispensables para su supervivencia, al tiempo que rechaza cualquier intento de hacer padecer hambre a los palestinos, y exige además que se facilite la entrada plena, rápida, segura y sin trabas de la asistencia humanitaria a gran escala y bajo la coordinación de las Naciones Unidas en la Franja de Gaza y en toda ella y su entrega a todos los civiles palestinos que la necesiten, incluidos los civiles que se encuentran en la zona asediada del norte de Gaza”.
Otro apartado demanda a las partes ceñirse al derecho global humanitario y proteger a los civiles. A su vez, resalta la necesidad de que exista rendición de cuenta y destaca el “compromiso inquebrantable” de la ONU con la solución de dos Estados.
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Sumado a esto, la Asamblea General de la ONU aprobó otra resolución en la que mostraba su “pleno apoyo al mandato a la UNRWA, la agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina” y rechazaba “la legislación adoptada por el Parlamento israelí el 28 de octubre de 2024”.
En esa fecha, el Parlamento israelí aprobó dos proyectos de ley para prohibir la actividad de la UNRWA en el país y su contacto con cualquier funcionario israelí, una situación que convierte en imposible la operación de los territorios palestinos ocupados, entre los que se encuentra la Franja de Gaza. La resolución apoyada por una decena de países, afirma el respaldo de la Asamblea al trabajo de UNRWA y “exige a Israel que respete el mandato” de la Agencia y tome acción rápidamente para que sus acciones puedan efectuarse sin obstáculos en la Franja de Gaza y Cisjordania, incluida Jerusalén Oriental.
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El documento deplora la legislación aprobada por el parlamento israelí hace dos meses. De la misma manera, insta a Israel a responsabilizarse de la situación y permitir y facilitar una asistencia humanitaria plena, rápida, segura y sin complicaciones en toda la Franja de Gaza, abarcando también la prestación de servicios básicos necesarios para la población civil.
Por su parte, el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) aplaudió el pasado jueves la resolución aprobada por la Asamblea General de Naciones Unidas. “Aplaudimos la adopción por parte de la Asamblea General de la ONU, con apoyo de 158 países, de una resolución pidiendo un alto el fuego en Gaza y que se permita que la población civil tenga acceso inmediato a servicios básicos y ayuda humanitaria y rechazando cualquier intento de matar de hambre a los palestinos”, han señalado.
Con estas palabras, ha expuesto que el grupo “ha confirmado a lo largo de todas las etapas de la agresión” que “responderá a toda decisión o iniciativa que lleve a un alto el fuego”, según registra el diario palestino Filastin.
Argentina ha vuelto a sorprender con su último voto en la ONU, al igual que sucedió con la resolución de protección a mujeres y niñas en la organización.
Fuente Diario 24
