
Javier Milei y Mauricio Macri cenaron a solas este martes por cuarta vez en un mes y en la previa de un nuevo discurso del líder del PRO junto a sus gobernadores. A pesar del gesto de distensión presidencial, arrecia la desconfianza en la Casa Rosada: creen que, tarde o temprano, el exmandatario volverá a atacar al «tridente de hierro» mileísta.
La última cena de Javier Milei y Mauricio Macri
Según pudo saber Letra P, en la última cena entre ambos, hubo un buen clima de conversación, sin una agenda particular. La cita contrasta con la del jueves pasado, cuando Macri vio a Milei horas después de que el bloque PRO rechazara en Diputados el DNU que le otorga a la SIDE, que administra Caputo, unos $100 mi millones para gastos reservados.
Si bien no trascendió si las políticas de inteligencia fueron parte de la conversación en la residencia presidencial de este martes, en la Casa Rosada dieron a entender que hasta tanto Macri no baje la orden a sus senadores de acompañar el DNU no habrá nuevas instancias de negociación política entre ambos sectores.
«Hasta que no nos den los 100 palos verdes que no cuenten con nosotros», se escuchó decir, ofuscado, a un funcionario de diálogo cotidiano con el jefe de Estado. Si la cámara alta rechaza también el decreto en el recinto, Caputo se quedará sin fondos que la oposición sospecha que ya comprometió en su mayor parte.
La enseñanza de Tyrion Lannister
El entorno presidencial no sólo ve con desconfianza a Macri. Con Caputo de viaje, la interna libertaria estalló la semana pasada mostrando que LLA es un polvorín.
Fanático de Game of Thrones, Caputo copió una estratégica decisión de la serie de HBO antes de emprender sus vacaciones. El asesor le informó a cada integrante del gabinete un destino distinto al que iría con su familia, para identificar quién filtra información a la prensa: por ejemplo, a unos les dijo que pasaría unos días en Bariloche y a otros en Ushuaia.
Fue lo que hizo Tyrion Lannister mientras oficiaba de Mano del Rey, cuyo prendedor que simboliza ese estatus portaba el propio Caputo en los pasillos de la Casa Rosada en mayo. El personaje de ficción descubrió que el «topo» era Meñique, uno de sus rivales en la mesa de consejeros. El asesor de Milei cree que fue Sandra Pettovello, con quien mantiene una silenciosa pelea envuelta en acusaciones cruzadas que involucran tanto a los organismos de inteligencia, que la ministra sospecha que la espían de manera ilegal.
La ministra, sostenida en varias oportunidades por el propio Milei, fue, además, uno de los vínculos de Macri en los tiempos en que el expresidente dejó de hablar con Caputo, en medio de las semanas más tensas entre el PRO y LLA. Pettovello, además, es señalada por otros colegas por ser la persona que filtra datos de las reuniones de gabinete.
Fuente Letra P