CIUDAD DE CORRIENTES La carrera de Ricardo Colombi parecía haberse hundido a fines de abril, cuando Gustavo Valdés lo humilló con votos en la Convención de la UCR local y le arrebató el control del partido en esta provincia. “Fue 128 a 8”, contabilizó en voz alta el gobernador su holgado triunfo en la cumbre del estadio del Club San Martín. Dos meses después, la trágica desaparición de Loan Peña dio vuelta el escenario político.
La tensión entre ambos es noticia conocida para la ciudadanía correntina. “Valdés tiene una interna tremenda con Colombi. Eso lo sabe todo el mundo acá. Colombi quiere volver a ser gobernador, así que va a aprovechar esta situación”, razonó Andrea, una mujer de 40 años, trabajadora del sector turístico, que conversó con Letra P en la plaza Sargento Cabral, pero prefirió no dar su apellido.
Como en la calle, en la política correntina crecen las especulaciones sobre la máxima atención que generó el caso Loan en los medios nacionales, sobre todo aquellos más afines al sector de Juntos por el Cambio, que ahora no ahorran críticas descarnadas hacia Valdés desde la pantalla. El gobernador mandó a hacer algunas averiguaciones vía consultoras.
En el oficialismo y en el peronismo coinciden en que, detrás de tanto despliegue, podría haber “fuego amigo” proveniente del sector de Colombi. Dicen que “solo Ricardo” tiene poder para azuzar algunas coberturas. El gobernador tiene varios frentes de conflicto abiertos dentro del radicalismo. No solo se enfrentó con Colombi, sino que entró en guerra con el eje que forman Martín Lousteau y Emiliano Yacobitti por el control del partido, a fines de 2023. Valdés tuvo el apoyo del gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo. A Lousteau lo bancó Gerardo Morales. Valdés perdió la pulseada y las relaciones entre bandos quedaron tensas.
Qué dijo en privado Ricardo Colombi
Aunque es senador provincial y participó de las reuniones que los legisladores tuvieron el 27 de junio con los ministros de Seguridad, Buenaventura Duarte; de Justicia y Derechos Humanos, Juan José López Desimoni, y con el jefe de la Policía de Corrientes, Alberto Molina, Colombi mantiene silencio público sobre la causa Loan.
El exgobernador también se mostró cauto en privado, delante de compañeros de bancada que responden directamente a Valdés, como Henry Fick y Diego Pellegrini. Fick es presidente de la Convención provincial de la UCR que le propinó el golpe político a Colombi a fines de abril. Antes, había sido un fiel ladero del exgobernador. En el radicalismo provincial hablan de la “traición” del senador. Pellegrini está señalado como la persona que acercó a declarar a Laudelina Peña, la tía de Loan, que quedó detenida este viernes por los delitos de “sustracción, alteración de evidencias del caso y ocultamiento” del niño.
Laudelina fue asesorada por el abogado José Codazzi, oriundo de la localidad de Esquina, al igual que Pellegrini. La mujer se acercó a declarar el viernes 28 de junio a la ciudad de Corrientes frente al fiscal provincial Gustavo Robineau, cuando la investigación ya tramitaba ante el fuero federal. Dijo que el niño había sido víctima de un “accidente”. La versión del accidente fue abonada por Valdés el sábado 29, cuando dijo en su cuenta de X que la investigación había dado “un paso fundamental” hacia el esclarecimiento.
Los legisladores provinciales recordaron que habían escuchado las versiones del supuesto accidente por primera vez en la reunión del jueves 27, de boca de sus pares del oficialismo. “¿De dónde sacaron eso ustedes?”, les preguntaron durante el encuentro del que participaron los ministros.
Colombi no dijo nada sobre la hipótesis, pero aprovechó la ocasión para hacerles preguntas a los enviados de Valdés. “Decime, Molina ¿(Juan Carlos) Castillo y (Walter) Maciel no se conocían de antes?”, le preguntó Colombi al jefe de la Policía. El exgobernador hacía referencia al fiscal provincial Castillo, que tuvo a su cargo la investigación inicial de la causa, y al comisario de 9 de julio. Castillo y su colega, Guillermo Barry, primeros fiscales de la causa, acusaron a Maciel de entorpecer la investigación y de haber plantado evidencia falsa.
Antes de ser fiscal, Castillo fue policía. Maciel, el comisario ahora detenido por la desaparición de Loan, fue trasladado a esa localidad tras ser denunciado por abuso sexual de una mujer policía en Monte Caseros. Los ministros escucharon también cuestionamientos de parte de los senadores por haber puesto al frente a la comisaría a un hombre que tenía, como mínimo, una denuncia de abuso sexual.
Fue llamativo, en el mismo sentido, el cuestionamiento a ese traslado por parte del fiscal general de Corrientes, César Sotelo, quien confirmó la acusación que pesaba sobre Maciel. “Sé que tuvo una denuncia por abuso en 2019. Habría que preguntarle a la persona que pone a funcionarios con denuncias concretas en ciertos lugares”, dijo.
Sotelo ostenta un poder inconmensurable. Es jefe de los fiscales de la provincia, pero también tiene a su cargo la Defensoría General y la Asesoría General, a contramano de lo que indica un fallo que dictó la Corte Suprema de Justicia de la Nación en 2012, cuando ordenó avanzar en la división del Ministerio Público. El fiscal general fue propuesto en ese cargo por Colombi.
La pelea por la UCR
La pelea que Colombi y Valdés protagonizan desde hace años terminó materializarse el 29 de abril en la Convención provincial de la UCR, que rechazó prorrogar el mandato de Colombi como presidente del partido y llamó a elecciones para el comité provincial el 27 de octubre. Fue una victoria holgada del sector de Valdés, que busca convertirse en presidente del partido para definir a su sucesor.
Colombi pidió la nulidad de todo lo actuado en la Convención y sondeó a la justicia electoral para que intervinieran el partido del distrito Corrientes. Le dijeron que esa instancia le corresponde a la Convención Nacional de la UCR.
La disputa entre Valdés y Colombi tiene su eje en las elecciones 2025. Antes de la causa Loan, todo parecía encaminarse a una ruptura definitiva entre ambos sectores, que podía configurar un escenario de cuatro espacios diferentes: uno encabezado por Valdés, otro de Colombi que podía ir hacia un acuerdo con algunos sectores del peronismo, los libretarios y un peronismo más independiente. Valdés impulsa como candidato a gobernador a su hermano, el intendente de Ituzaingó, Juan Pablo Valdés. Colombi ya salió de campaña por la provincia.
Pero la desaparición de Loan pudo haber dado vuelta la historia. “Vuelve todo a fojas cero”, dicen en el radicalismo correntino, donde ahora piensan que Colombi puede aprovecharse de un debilitado Valdés para imponerse nuevamente como jefe y candidato.
Fuente Letra P
