Antes de su regreso a la Argentina de una gira empresarial por Estados Unidos, el presidente Javier Milei hizo una última escala en El Salvador, donde participó de la segunda asunción como presidente de Nayib Bukele.
Milei llegó al Palacio Nacional, recorrió una alfombra roja y luego, antes de ubicarse en primera fila, fue aplaudido por los presentes. Entre otros invitados se encontraron el presidente paraguayo, Santiago Peña; el presidente de Ecuador, Daniel Noboa; el Rey de España, Felipe VI, con quien el libertario compartió gestos y sonrisas a la distancia, en medio de la tensión diplomática con el socialista Pedro Sánchez; y con el hijo de Donald Trump, a quien se cruzó en la puerta del Hotel Sheraton.
Junto a la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, el mandatario argentino fue recibido con honores y pudo tener una de las pocas recepciones privadas junto al mandatario salvadoreño, como mostró el vocero en un video que subió a las redes.
Convertido en uno de los mandatarios más apoyados del mundo, ya que superó el 85% de los votos en la última elección, el popular presidente de El Salvador inició este sábado su segundo mandato, y si el inicio de su primera gestión marcaba algunos puntos de incertidumbre, en este segundo capítulo su control del país es absoluto.
Su desafío de gestión es mantener el altísimo nivel de seguridad que logró, con medidas muy eficaces en el combate contra la delincuencia y el crímen organizado, pero ahora debe mejorar la situación económica general, como prometió en su campaña.
«En este nuevo tratamiento para sanar la economía quizás también haya que tomar medicina amarga», advirtió a sus seguidores, asegurando que «el país ya se curó de las pandillas y ahora quiere curarse de la mala economía».
Fuente La derecha diario
